Mira, si eres de los que cree que la inteligencia artificial es como Skynet, a punto de robarnos el empleo, te tengo noticias: la AI en publicidad no es el Terminator, es más bien el robotito de Wall-E, ayudando a que no perdamos el tiempo en tareas monótonas (y de paso, para que el viernes salgamos a la hora de la happy hour).

¿Qué onda con el “AI-storming”? Las juntas creativas en LUNAVE ya no son solo café y post-its. Ahora, además del “¿y si hacemos un reel con gatitos?”, tenemos a herramientas como Runway ML o Descript echándonos la mano. ¿Necesitas un video? En vez de horas de edición, ¡pum!, la AI lo resuelve. Es como tener un becario que no pide vacaciones ni se queja en el chat.

Y no, ChatGPT no es solo para escribir posts básicos A ver, ChatGPT no solo sirve para “redactar textos bonitos”. Lo usamos para cosas mucho más profundas, como proponer ideas de negocio locas, simular diálogos con audiencias específicas o hasta para entrenar a nuevos integrantes del equipo con escenarios interactivos. Es como tener un guionista, un profesor y un estratega, todo en uno.

De adivinanzas a insights reales ¿Recuerdas cuando los reportes de campaña eran básicamente un “creo que funcionó”? Ahora, con cosas como Crimson Hexagon o Amper Music, analizamos audiencias y hasta generamos música de fondo sin pagar derechos de autor. Porque claro, la AI no solo nos ayuda a optimizar campañas, también a hacerlas más cool.

La creatividad no muere, se vuelve cyborg No te voy a mentir, a veces usamos Midjourney para ver cómo se vería un unicornio punk en un apocalipsis zombie. Pero en serio, la AI se ha convertido en nuestro compa en la etapa de CONECTAR, ayudándonos a generar conceptos visuales únicos y a aterrizarlos en piezas con un punch brutal.

¿Y los resultados? Más afinados que autotune en reguetón. Con Google Ads y su bidding inteligente, o la automatización de audiencias en Meta, la AI nos ayuda a disparar campañas justo en el blanco. Como si fueras Legolas, pero del marketing digital.

¿Moraleja? Ninguna, porque nada es aún una certeza absoluta en un mundo de disrupciones continuas, pero hay algo que parece evidente: la AI no viene a quitarnos la chamba, viene a darnos superpoderes. Y en LUNAVE, estamos listos para usarlos (sin capa, pero con muchas ganas).

¿Y tú? ¿Ya usas AI en tu día a día? ¿O eres de los que todavía piensa que es solo para generar “fotos realistas” de ovnis? ¡Cuéntame!